Inicio / Eficiencia y ahorro / ¿Por dónde se escapa el calor de tu casa?
Una casa mal aislada o por la que se pierde el calor por otro motivo, genera muchos euros de pérdidas al año. Si apagas la calefacción y el calor desaparece rápido, puede que tengas un problema. La pregunta es: ¿Por dónde se va el calor y cómo evitar las fugas? Te contamos todos los detalles en este artículo.
En España más de la mitad de los edificios se construyeron antes de 1979, cuando todavía no se había aprobado la normativa sobre el aislamiento térmico, por lo que sufren pérdidas de calor, sobre todo, a través de los denominados puentes térmicos, es decir, zonas en las que se transmite el calor o el frío, por ejemplo, el marco metálico de una ventana.
Si quieres saber si tu casa pierde calor existen dos pruebas que es posible realizar:
Este tipo de pruebas se pueden realizar cuando se hace una reforma en casa o cuando se construyen viviendas de obra nueva, pero también son aconsejables cuando se paga una factura de electricidad o de gas muy elevada, para saber si hay fugas.
En una vivienda los puntos débiles por donde se escapa el calor suelen ser el techo, las paredes, ventanas y puertas y el suelo.
En todas las viviendas existen puntos débiles que pueden suponer que consumas más energía de la que necesitas. Según datos de Ecoisola:
Para evitar que el calor se vaya de la vivienda y que la factura de la calefacción aumente, se pueden tomar varias medidas como las siguientes:
Si se va a realizar una obra de rehabilitación en casa, puede que sea el momento adecuado para mejorar la eficiencia energética de la misma y lograr unos ahorros en consumo muy importantes. Para ello existen diversas alternativas:
En definitiva, se trata de conseguir que tu casa sea eficiente desde un punto de vista energético y de que ahorres en la factura de la luz en los meses más fríos y en los más calurosos del año.